Con el tiempo, el material de nuestros suelos se desgasta. Aparte de que estéticamente no luce, también hay que pensar en los problemas prácticos. Por eso deberíamos saber en qué consisten pulir y abrillantar los suelos.

Los suelos dañados pueden llevar a otras consecuencias ya sean leves o más graves. En estos casos de desgaste del suelo, debemos hacer algo. Debemos buscar una solución para que tanto a nivel estético como práctico vuelvan a estar en plena forma.

Tenemos varios tratamientos que podemos aplicar para recuperar la buena imagen de nuestros suelos, como el pulir y el abrillantar. Aunque muchos seguro que pensamos que son lo mismo, existen ciertas diferencias entre ellos. El objetivo de los dos es similar, pero se aplican de forma diferente. Los dos tratamientos lo que quieren es que se recupere el brillo que tenía anteriormente los suelos de granito, de piedra caliza, mármol,…

Entonces, ¿cuál es la diferencia entre pulido y abrillantado?

  • En cuanto al abrillantamiento, podríamos decir que es bastante sencillo y rápido. Éste no afecta a la estructura, porque no penetra, es más superficial.

Si nuestro suelo está muy desgastado y tiene marcas muy profundas, el abrillantamiento seguramente no permitirá recuperar el brillo del principio. Necesitaríamos otro tipo de tratamiento más intrusivo.

 

  • El pulir también intenta recuperar el brillo anterior del suelo. Lo que hace para conseguirlo es cortar el suelo, dejandolo así recto y suave.

Por eso, como decimos, este método es más extremo, ya que a medida que lo utilizamos, el suelo va menguando. El material cada vez será más delgado y, debido a esto, debe tenerse precaución y no utilizarlo más de la cuenta.

Este tratamiento es, por tanto, más delicado y se tarda más en llevarlo a cabo.

 

¿Cuándo aplicar el pulido y cuando el abrillantado?

Podríamos decir que no es aconsejable pulir el suelo de forma frecuente, sino cada muchos años.

Se deben tener en cuenta las características en las que se encuentra el suelo. También los condicionantes externos, y del entorno específico de cada caso son importantes.

 

Para evaluar cómo se encuentra en ese momento su suelo sería recomendable que se contactara con un especialista. Éste le aconsejará y le ofrecerá soluciones profesionales sobre cómo cudiar de manera correcta su tierra.

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